Opinión

Opinión|
Murcia – Ciudad Real. Seguros en el ramo de la construcción, camino de la recuperación
El ramo que más ha sufrido las consecuencias de la crisis económica intuye ya una leve recuperación tras una catarsis que ha transformado por completo el sector de la construcción. Estos dos corredores lo viven desde dos diferentes perspectivas, en el litoral levantino nos cuentan cómo han logrado resistir mientras que en la meseta interior han encontrado un nicho de mercado basando su estrategia en un servicio diferencial.


Antonio Navarro
Director de Navycal, Murcia.
Jacobo Peña
Director de Segurox, Ciudad Real.


 

Apostar por el valor añadido y la exclusividad
Antonio Navarro inició su vida profesional en una gestoría, donde se familiarizó con el ramo de la construcción. En 1989 optó por dedicarse a los seguros como corredor independiente y, cuando en 1991 fundó su propia correduría, escogió esta especialidad. “El mío es un negocio mixto, me gusta el tema empresarial y los seguros novedosos donde el valor añadido tenga mucho que ver. Entiendo que la especialización es fundamental y, por mis conocimientos anteriores, aposté por la construcción. En la época del boom tuvimos mucha incidencia. Aunque ahora tenemos que dedicarnos más a otros ramos, todavía seguimos teniendo un departamento bastante activo”.



Y la crisis fue precisamente lo que convenció a Jacobo Peña a optar por el ramo de la construcción. Este corredor procedente del sector de la automoción, comenzó en los seguros de la mano de su hermano como agente exclusivo de una compañía. “Pero yo pienso que para defender al cliente es importante conocer el mercado y plantearle las mejores ofertas. Así que me hice corredor y fundé Segurox con delegación en Valencia y Ciudad Real. La compañía está dividida en dos departamentos diferenciados: Segurox Riesgos Industriales, dirigido a empresas medias con facturación entre 4 y 40 millones de euros, y Segurox Construcción. Elegí este ramo como especialidad precisamente porque fui consciente de que con la crisis muchos iban a abandonar y nos pareció un momento idóneo para cambiar el servicio, trabajar mejor las pólizas y ofrecer algo un poco distinto. Nos hemos especializado en un producto muy exclusivo, el seguro decenal sin OCT (Organismo de Control Técnico), contratable en cualquier momento, ya sea con la obra terminada, empezada o durante el proceso de construcción”.

Decenales, los más productivos

El seguro decenal ha sido también uno de los puntos fuertes de Navycal. “Puedo presumir de haber realizado el primer seguro decenal que hizo en la región de Murcia la compañía especializada en construcción, Asefa”, asegura Antonio Navarro. “Se trata de un seguro para edificios de nueva construcción, obligatorio por diez años a partir de la finalización de la obra que cubre los daños estructurales. También estamos especializados en pólizas de responsabilidad civil para todos los intervinientes en una obra y en el todo riesgo en construcción. Algunos son opcionales, aunque yo los aconsejo todos porque la construcción tiene muchos riesgos”. 

Lo mismo opina Jacobo Peña en esta cuestión. “El todo riesgo de construcción para las obras que se están haciendo y la responsabilidad civil como promotor o constructor deben tenerlos todos los profesionales que trabajan en el sector, no son obligatorios pero hay que estar loco para trabajar sin contratarlos. Respecto al seguro decenal sin OTC, en España hay muy pocas compañías que lo hagan y nosotros tenemos acuerdos con todas ellas. Dentro de la laboriosidad que puede tener este tipo de seguro nosotros lo facilitamos solicitando menos documentación, teniendo un departamento técnico propio, ayudando a facilitar todo lo que es la recogida de documentación para el cliente y para la compañía, con lo cual somos más rápidos y más efectivos y procuramos ser más baratos lógicamente”.


Conocer a fondo los riesgos


Además, para diferenciarse en este ramo es fundamental conocer a fondo los riesgos que entraña  y aconsejar adecuadamente al cliente. “En Navycal estudiamos el riesgo del cliente desde todas las vertientes, aunque en ocasiones hacemos planteamientos que después se usan para contratar la póliza en otro sitio, pero eso es parte del oficio”, se lamenta Antonio Navarro. “Pero lo que sí está claro es que lo primero que tenemos que hacer es asesorar, y elaborar un estudio de los posibles riesgos que tiene cada obra. Lo bueno es que al menos te escuchen y se informen y que sientan que el consejo profesional que les has dado es bueno y adecuado. Si te tienen en cuenta como consejero, antes o después vendrán por la oficina otra vez”.

También para Jacobo Peña ofrecer un buen servicio es primordial. “Durante unos años este ramo era la gallina de los huevos de oro, muy productivo en todos los sentidos y se llevaba un gran volumen de primas. Con la crisis pasó a ser el patito feo. Nosotros lo hemos ajustado las primas y hemos apostado por aquellos constructores de siempre, los que procedían del mundo de la construcción y que sabíamos que iban a seguir viviendo de él independientemente de que pudieran pasar malos momentos. Nos centramos en estos clientes, los trabajamos mejor, les ofrecimos mejor servicio y ajustamos sus primas a la situación en la que se encontraban”.

 

Levante e interior: dos caras de la crisis de la construcción

Para ambos corredores hay un antes y un después de la crisis en el ramo del seguro de la construcción, aunque con particularidades según la zona donde se mueve cada uno. “En la zona de la costa levantina ha afectado muchísimo. Nosotros disfrutamos del boom de la construcción en el litoral, con mucho trabajo proveniente de grandes urbanizaciones. Era una locura, con promociones de 200 y 300 viviendas. Eso se acabó, ahora una RC de construcción puede valer un 20 % de lo que costaba antes.  Lo que ha ocurrido también es que los precios se han adecuado más a la realidad, ya que la siniestralidad también se ha reducido mucho porque anteriormente había trabajando mucha gente que no era del ramo y ahora hay menos gente, y los que han quedado son más profesionales. El único que mantiene el volumen es el seguro de daños con el todo riesgo en la construcción ya que los robos están a la orden del día: cables, material en los edificios que se están construyendo, etc.”

“En Ciudad Real se ha sufrido la crisis como en pocos sitios porque es una zona que, al  ser capital de provincia y ser pequeña, siempre ha sido muy de servicios y con mucho funcionario por metro cuadrado”, señala Jacobo Peña. “Teníamos que concentrar la venta de nuestros productos a las pocas empresas constructoras que había en la zona, así que al desaparecer la mayoría de estas con la caída del sector inmobiliario nos quedamos sin opciones. En otras zonas se perdió la construcción pero siguieron quedando otras muchas cosas, en cambio aquí como no teníamos la alternativa de la industria, nos quedamos sin rumbo”.

 

Destellos en el futuro

“Ahora dedicamos mucho menos personal al departamento de construcción y nos hemos dedicado más a otros ramos”, comenta el corredor murciano que, sin embargo, percibe ya una cierta recuperación en el sector. “No se nota en la totalidad pero se ven destellos y especialmente en la costa, donde se paró antes que en interior. Parece que se ha vuelto a poner en marcha el mercado europeo, sobretodo el nórdico, y está habiendo promociones y ventas. No con los precios de antaño y siempre con muchísima más moderación que lo que había antes, pero poco a poco parece que se recupera”.
Y ambos se muestran optimistas con el futuro de un sector que parece que finalmente encuentra su punto de equilibrio. “Siempre habrá movimiento, aunque no volvamos al boom que hemos vivido”, opina Antonio Navarro. “Y tampoco lo veo necesario, hay que actuar con tranquilidad. Eso sí, mientras queden viviendas bancarias, -y todavía muchas- lo tenemos difícil porque los bancos no dan crédito al promotor si tienen viviendas para vender“. 


Lo mismo opina Jacobo Peña. “Sí, sin duda alguna. En Ciudad Real por lo menos. Para nosotros un buen medidor son las solicitudes que recibimos de seguro decenal porque se producen antes de empezar la construcción o justo cuando se va a iniciar y desde luego este último año se han incrementado mucho las solicitudes”.
El corredor de Ciudad Real también le ve futuro al seguro de la construcción. “No llegaremos seguramente a los volúmenes que manejábamos años atrás pero sí que estoy convencido de que va a ser un sector importante como siempre lo ha sido en España y que va a alcanzar su madurez. Quizá no se construirá a ritmo de un millón de viviendas al año pero tampoco nos vamos a quedar con las 100.000”.


 

Artículos relacionados
Opinión|
Cojebro, 25 años de una organización con las puertas abiertas de par en par
Como muchos ya saben, a estas alturas, Cojebro surgió en el año 1993 en un viaje a Australia, organizado por […]
Opinión|
Christophe Cotille, director general de GDC Patrimonio
La profesionalización del asesoramiento financiero Desde su creación en mayo de 2016, GDC Patrimonio está creciendo exponencialmente con ventajas competitivas […]
Opinión|
Miguel Ángel López Trujillo y Konstantin Rabin, Kontomatik
Seguros frente a insurtech Miguel Ángel Trujillo es country manager Iberia de Kontomatik Konstatin Rabin es director de Marketing de […]